El 75% de los seres humanos pulsar’an en ÇAceptarÈ si les apareciera la ventana anterior mientras ÇtrabajanÈ con su ordenador. Es un hecho emp’rico que conoce cualquier inform‡tico profesional, especialmente si ha dado clases de inform‡tica. El porcentaje se eleva al 85% en el caso de los funcionarios. El otro 15% son los que est‡n de baja, de vacaciones o desayunando. No se han hecho estudios con simios ni con moscas de la fruta. El autor demostrar‡ este hecho as’ como otras verdades inform‡ticas indiscutibles, como que los tontos existen o que hay inform‡ticos que no saben nada de din‡mica de part’culas subat—micas, a pesar de que se haga Çcon ordenadorÈ. Este libro es un relato muy divertido que encadena anŽcdotas relacionadas con la inform‡tica, pero que cualquier lector puede entender y disfrutar mucho con ellas, aunque no sea inform‡tico. No hace falta ser inform‡tico para re’rse con aquella mujer que no quer’a que su correo electr—nico fuera ÇextranjeroÈ porque tem’a que todos los emails de su hija le llegaran en inglŽs. JosŽ Luis çlvarez Fern‡ndez, el autor de este engendro literario, es lo que la gente llama un Çinform‡ticoÈ. Es decir, un hombre (en el 95% de los casos) extra–o que sabe ordenar los canales de la tele. Es autor de numerosos manuales de inform‡tica y esta es su primera obra no tŽcnica.
